¿Por qué prohibir los cigarros electrónicos no es la solución?
Actualmente hay estudios que demuestran que el cigarro electrónico es mucho menos dañino que el cigarro tradicional, puesto que reduce el riesgo de enfermedades y muertes relacionadas al consumo de tabaco.
Los estudios de Public Health England, afirman que el cigarro electrónico es un 95% menos dañino que el cigarro común. El vapeo tiene más efectividad para dejar de fumar qué medicamentos, chicles o parches.
A pesar de las muertes, la prohibición del tabaco nunca fue solución para regularlo, pues mucha gente empezó a consumir aún más. Así como se intentó con el alcohol en los años veinte del siglo pasado en USA, el resultado fueron mafias, violencia y mayor consumo. Por ello, prohibir nunca es la solución.
Se sabe que el vapeo está dirigido a que más personas involucradas con el tabaco, puedan optar a una solución o reemplazo más saludable y controlado. Y debemos tener en cuenta que un pilar fundamental en cualquier sociedad es la libertad de acción mientras estas mismas no perjudiquen a los demás.
Por ello, ¿Cuáles son las consecuencias negativas de la prohibición?
Aquellos que quieren dejar el cigarro tradicional no pueden acceder a una de las alternativas más eficientes, y quienes lo consiguen no saben cuál es la calidad de los cartuchos o dispositivos que obtienen. Mientras tanto, aquellos productores o comerciantes que quieren dedicarse a este sector también se verán perjudicados: se pierden puestos de trabajo y se perjudica el sector privado de la economía.
La fundación de Smoke Free World afirma que si no existieran estas regulaciones y debates con respecto al tema, al tener los productos disponibles con mayor amplitud, se podrían prevenir entre 3 y 4 millones de muertes al año.
Y el derecho que tenemos a elegir y consumir, debe ser una prioridad para el gobierno.
¿Qué opinas al respecto? ¿Se debería prohibir el vapeo?
Fuente: https://tuvaporizador.com/vapear/vapear-vs-fumar/